Chelsea 2-1 Arsenal: Una dura derrota que sigue exponiendo a Wenger

El domingo Arsenal visitaba Stamford Bridge, una chance importante de recortar puntos en su pelea por llegar a puestos de Champions League, y a la vez para demostrar que puede plantársele a un equipo actualmente superior en calidad, pero no en historia como lo es Chelsea.

Al encuentro hay que dividirlo en lo sucedido en el primer tiempo y en el segundo. La primera parte fue prácticamente toda azul. Aunque la primera chance la tuvieron los Gunners: un gran desmarque de Giroud, a quien Walcott le puso una gran pelota a la espalda de la defensa, pero el francés no aprovechó la ocasión y la envió apenas afuera del palo izquierdo de Cech. Dos minutos después, tras una recuperación con falta (que Atkinson, de mal partido, omitió) de Ramires frente a Coquelin derivó en una pelota para Mata a la espalda de Sagna que el español no desperdició. 1-0, el Chelsea no perdonó lo que el Arsenal sí.

A partir de ahí la presión de los Blues y su salida rápida fueron demasiado para el Arsenal. el doble pivot Diaby-Coquelin fue ahogado y no había salida limpia desde abajo. Chelsea recuperaba y enviaba la pelota a Óscar, Mata o Hazard, que hacían sufrir a una defensa que tuvo muchos problemas para marcar en los laterales, porque Sagna quedaba siempre a mitad de camino y nunca volvió a tiempo y Gibbs se veía superado cada vez que atacaban por su costado. A los 15 minutos la historia estaba 2-0. Una mala salida, una contra bien manejada por Chelsea, una pelota a la espalda de Sagna para Ramires, a quien Szczesny le cometió el penal que Lampard transformó en el segundo gol. Un festín azul fue esa primera mitad.

Pero el segundo tiempo fue muy distinto. Un Chelsea que apostó a la contra y cedió pelota y campo a un Arsenal que tuvo mayor decisión, pero no tanta claridad para ir a buscarlo. Tuvo algunas llegadas en el inicio entre pelotas paradas y jugadas de ataque por el lado de Walcott. A los 15 del segundo tiempo, Walcott definió muy bien una habilitación fantástica de Cazorla y le dio vida al partido. Ramsey y Arshavin ingresaron por Diaby y Coquelin (lesionado), dejando en claro que Arsenal estaba jugado con el objetivo de, al menos, empatarlo. Durante 10 minutos Chelsea fue ahogado por una ráfaga roja y blanca, tanto que Benítez Sacó a Óscar y puso a Bertrand para defender. Arsenal careció alguien que rompa el molde y terminó sin aire y sin ideas, viendo como se le escapaba un partido donde mereció un poco más.

En estos partidos es en donde sale a la luz en una mayor medida que tenemos un plantel al que le falta jerarquía para ganar los 'partidos grandes'.  Wenger sigue dando excusas y confiando en lo que hay diciendo "we have a big squad", pero la realidad misma refuta sus dichos. Debíamos jugarnos el todo por el todo y lo más punzante con lo que contábamos era Arshavin, éste Arshavin de bajo rendimiento y casi no tenido en cuenta por el DT. 

Las lesiones y los problemas aquejan y el recambio disminuye, pero da la sensación de que el francés no observa esto. En el mediocampo hubo que adaptar a Wilshere de mediocentro ante la ausencia de Diaby durante los pasados 3 meses, perdiendo presencia física y restándole peso ofensivo a Jack, que rinde mucho mejor como '10'. Arriba nos falta peso porque Giroud es un muy buen delantero, luchador, asistidor y criterioso, pero no es clínico, y eso lo hemos pagado con puntos perdidos. 

Arsène, es tiempo de jugársela por un plantel más amplio, tener mayores variantes para combatir las lesiones en vez de improvisar. No solamente para alcanzar el objetivo este año, sino en Junio para fortalecer el plantel y evitar más fugas como las de Cesc o Van Persie. Plante cara Arsène, por el Arsenal. A quien tenga que plantársela, pero hágalo. Usted no se puede desprestigiar más por creer en un modelo al que la dirigencia le ha puesto mil palos en la rueda, usted vale muchísimo más, y lo sabe.